martes, 18 de enero de 2011

¿Por qué el Estado debería enseñar Religión?


Hace unos días, un Arzobispo Mexicano propuso incluir la religión en la educación primaria, obviamente, después se alzaron voces contra esta recomendación. Entre todo esto, lo mas interesante y que tiene siglos escuchándose fue que enseñar religión es algo retrograda, no tiene nada que aportar a la sociedad, debe enseñarse en la privacidad del hogar, el estado laico y etcétera.
Todo eso me recordó a una clase de la universidad sobre la libertad religiosa, donde después de tanta discusión, se llego a esta conclusión.


El Estado debe cuidar el pluralismo y la tolerancia, garantizar el derecho a la religión, que se trata de poder decidir y asumir nuestras propias creencias, participar en actos de culto y asociarse con motivos religiosos.

Si el Estado impone su convicción atea, terminaremos como dijo el profesor: “habrá que quitar el escudo nacional (con simbolismos religiosos indígenas), el himno nacional (que habla de Dios), los billetes (con sacerdotes y monjas) y prohibir que los ingleses vengan a jugar al estadio para que no canten Dios salve a la reina”, al buscar la educación basada solo en la razón, nos limitaríamos a lo que conocemos. Por otro lado, también es cierto que si se busca imponer la Fe y solo la Fe, será todo un simple sentimentalismo, y seremos unos fundamentalistas.

Joseph Ratzinger dio la solución, la razón y la religión no pueden vivir aisladas “la bomba atómica es un producto de la razón; también la producción y selección de hombres han sido creadas por la razón, […] Deberían circunscribirse recíprocamente la religión y la razón, mostrarse una a otra los respectivos limites y ayudarse a encontrar el camino”.

Es importante aceptar que existe un Dios; Que este creo una ley natural que nos rige a toda la humanidad; Que la comunica a través de la conciencia; Y que esa misma ley forma a la moral y la ética. “La ciencia en cuanto tal no puede generar una ética”

Pero entonces, ¿que aporta la religión a la sociedad? todo país necesita, para salir adelante, personas dispuestas a hacer sacrificios a lo largo del tiempo. Estas convicciones las sacan de la religión, que ofrece todo un menú de por que hacer las cosas. ¿Por que me toca a mí cuidar de los huérfanos? ¿Por que de los ancianos? ¿Por que ayudar a la comunidad?

La religión aporta, entre otras cosas, dos puntos muy importantes:

1. Preguntas de la existencia humana; ¿por que existo? ¿Por que dejare de existir? ¿Que pasa cuando dejo de existir?
2. Rescate; la conciencia juzga lo que hacemos, nos juzga buenos o malos. Necesitamos

Liberar la conciencia y la religión nos da esa oportunidad, nos da palabras de aliento “no pasa nada, sigue adelante”. Nos dice que vale la pena vivir la vida, seguir trabajando, seguir amando a los demás, por que hay algo más allá de la muerte, esta no es el límite.






El estado laico, la separación iglesia-estado, no implica que el Estado deba asumir el modelo ateísta y decir  “Dios no existe”, y de hecho, eso es ir en contra del Estado laico, pues con eso, el Estado toma una convicción religiosa. Al estado no le toca tomar postura religiosa, pero al educar a los niños diciendo que Dios no existe y no tiene nada que aportar a la sociedad la están tomando, pues al no hablar de nada, ya es decir algo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario